La alumna Rocío Mendoza tiene 17 años y fue elegida junto a otra estudiante rosarina para ser las representantes de la provincia en la instancia nacional del Parlamento Juvenil del Mercosur. Su proyecto busca la inclusión de la lengua de señas en las escuelas.

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Por Alejandro Venzatti

«Si dicen que la escuela es tan inclusiva ¿por qué no colocan la lengua de señas? Me gustaría que se aplique en todas las escuelas de la provincia y el país». Con ese cuestionamiento que finalizó en un proyecto, Rocío Mendoza, de 17 años y alumna de quinto de la Escuela N° 340 de Santo Tomé, participará de la instancia nacional del Parlamento Juvenil del Mercosur en representación de la provincia de Santa Fe. Su iniciativa busca incluir la lengua de señas como un taller en las escuelas.

El Parlamento Juvenil del Mercosur está justamente pensado bajo la idea de «la escuela que queremos». En ese marco, los alumnos presentan proyectos para mejorar algo en la enseñanza educativa o en las escuelas, ya sea a nivel nacional o provincial. «Si vamos a hablar de integración en las escuelas tenemos que ver las diferentes necesidades que tienen los chicos», dijo Mariela Catena, directora de la institución.

«El eje que eligió Rocío tiene que ver con los Derechos Humanos y plantea el tratamiento del aprendizaje de la lengua de señas en las escuelas secundarias mediante un taller hasta que haya una ley y se la instaure como de estudio obligatorio», comentó Tamara Otazo, la profesora que la acompañó en el proceso de preparación del proyecto.

La propuesta de Rocío nace mediante una experiencia que le tocó vivir cuando quiso aprender la Lengua de Señas Argentina (LSA). «En Santo Tomé tenemos un Liceo Municipal donde enseñan pero tenés que ser mayor de 18 años; también en un instituto de Santa Fe la enseñan pero no es gratuita», contó a El Litoral.

En la instancia provincial del Parlamento, Rocío llegó a un empate técnico con una alumna de la escuela Dante Alighieri de Rosario. Ahora, ambas representarán a la provincia de Santa Fe en el Parlamento Juvenil del Mercosur. Deberán presentar un documento con sus proyectos y con los demás trabajos tratados a nivel provincial. Las ideas se debaten, se votan y un alumno accede al congreso a nivel internacional.

«La profesora me planteó la idea de unirme al Parlamento y de ir a las Olimpíadas de Filosofía. Elegí el Parlamento porque mi perfil va más con un compromiso con la sociedad, con plantear una ley», dijo Rocío.

«Nos centramos mucho en el proyecto -agregó Catena- porque es una problemática que vivió ella a cuestión personal, y yo también con una experiencia propia como docente en otro colegio donde tengo tres alumnos sordos».

La directora del establecimiento contó cómo se sienten cuando un alumno de la escuela logra llegar a estos lugares. «Nuestra satisfacción es que los chicos puedan tener estas vivencias diferentes: participar del Parlamento, ir a unas Olimpíadas; nos enorgullece lograrlo y que se vea el trabajo de la escuela pública», cerró su relato.

La propuesta en el proyecto
En este proyecto propongo antes que nada la inclusión de la Lengua de Señas o LSA, como una forma de comunicación más, que se pueda aprender en forma de taller en todas las secundarias de la Provincia de Santa Fe. Esto sería, a partir del apoyo de un profesor intérprete.

El taller de LSA será un curso extracurricular, que iniciaría en el 1er año de secundaria finalizando aproximadamente entre 4to y 5to año, ya que para aprender la Lengua de Señas Argentina se necesitan 4 años ya que esta posee una estructura gramática compleja.